Dícense sentimientos moribundos
y amanecen los mounstros con nuevos bríos,
dícense ahoras que no se logran concretar
más que en una masturbación mental...
Relatos insaciables de añoranzas,
ocultas maravillas de tu amor
que me a dejado fuera de su reja,
observancias crueles,
distancias erradas,
de pronto caigo otra vez
en el lado obscuro
de mis propios complejos y temores
rindiendome al sentido del fracaso
"sabiendo que es tarde ya
para pedir perdón"
como dice la canción...
Historias inolvidables de miradas,
leyendas que no tuvieron continuidad,
momentos intrínsecos de tí,
donde vuelve mi deseo
a embargarme sin poderlo detener...
sincretismos estúpidos
y verdaderos nuevos paradigmas,
no hay ninguna claridad
asomada en el horizonte del oriente,
pero se siente una brisa
que acaso trae en su frescura
impreso el aroma de un dejo de esperanza...
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